«Nunca me había sentido tan llena en mi vida. ¿Llena? Si llena. Llena de amor, de confianza, de fuerza, de mi misma. Por primera vez me siento acompañada y con la voluntad de elegir lo que quiero y no quiero comer, Vivir este proceso acompañada por Fran ha sido una de las decisiones más valientes y gratificantes que he vivido. Desde que la conocí me sentí comprendida, que mis sentimientos eran válidos y entendió perfectamente lo que pasaba por mi cabeza y mi corazón. Me dió las herramientas para entender y manejar mis pensamientos, mis emociones y mis acciones, escuchándome y siendo consciente que la alimentación es un acto de amor y no debe ser una tortura. Me ayudó a reconocer mi grandeza y entender que somos muchos más que el cuerpo que habitamos, que también es nuestro hogar y debemos tratar con compasión.
Si bien mi TCA en algún momento me rompió, hoy me reconstruyó con más fortaleza y conciencia, nada de esto fuera posible sin la ayuda profesional y humana como la de la Fran. Infinitas gracias 💖. Sin que manden mis emociones, con la paz y la confianza de una plenitud que tenía en mi interior y que la Fran me ayudó a descubrirla.
Creo que el perdonarnos a nosotras mismas y reconciliarnos con cada parte de una nos hace libres, libres de poder elegir, de disfrutar y de tener una relación sana con la comida y con nuestro cuerpo.
Gracias Fran por tanto… «